Skip to main content

Ecocardiografía transtorácica

Ecocardiografía transtorácica

A través de la ecocardiografía transtorácica, los cardiólogos pueden detectar problemas como insuficiencia cardíaca, enfermedades de las válvulas y cardiomiopatías sin necesidad de intervenciones invasivas. Además, su accesibilidad y precisión la convierten en una herramienta esencial tanto para la detección temprana como para el seguimiento de patologías cardiovasculares.

¿Qué es la ecocardiografía transtorácica?

La ecocardiografía transtorácica, también llamada ecografía del corazón, es una prueba que permite ver el corazón en movimiento y a tiempo real para estudiar su forma, dimensiones, musculatura, circulación de la sangre, etc. 

¿En qué consiste?

La ecocardiografía transtorácica es una prueba muy sencilla que no causa dolor y suele durar unos 10 o 15 minutos. Se realiza con el paciente tumbado en una camilla y desnudo de cintura para arriba. Se coloca una sonda sobre el pecho del paciente (después de aplicar un poco de gel conductor, que está un poco frío). Esta sonda produce ondas de sonido que crean imágenes del corazón en la pantalla del ecógrafo.

¿En qué problemas de salud se realiza?

La ecocardiografía transtorácica forma parte del conjunto de pruebas que se suelen realizar en la primera visita de cardiología, juntamente con otras como: 

  • Evaluación de los síntomas que tiene el niño.

  • Exploración física completa: auscultación, palpación de pulsos, peso y toma de constantes vitales (tensión arterial, frecuencia respiratoria y cardiaca y saturación de oxígeno).

  • Electrocardiograma.

Se utiliza para examinar las válvulas y espacios o cámaras del corazón. También sirve para valorar el saco que rodea el corazón (pericardio) y para detectar defectos de la formación del corazón y de sus vasos sanguíneos, problemas en el miocardio (capa muscular del corazón), enfermedad cardíaca congénita, soplos, inflamación del pericardio, etc.

¿Cómo preparar al paciente?

Para realizar una ecografía transtorácica no se necesita una preparación especial, solo la colaboración del paciente, ya que los movimientos y el llanto hacen difícil que se puedan registrar las imágenes. Para poder tomar imágenes de calidad y evitar errores en el diagnóstico, es de gran ayuda que el niño permanezca tranquilo y quieto, por lo que se hace necesaria la colaboración de los padres.

En el caso de los bebés, se recomienda llevar ese día ropa que se abra por delante (tipo camisa o body abierto), para evitar la pérdida de calor durante la prueba y que el niño esté incómodo.

Es recomendable que los bebés no tengan hambre en el momento de hacer la prueba (se les puede dar un biberón o el pecho justo antes de la visita) y que lleven el pañal limpio y seco.

Así mismo, se recomienda que traigan su muñeco preferido o utilizar dispositivos móviles con videos para distraerles.

¿Qué se ha de tener en cuenta una vez realizada la prueba?

En la mayor parte de las ocasiones, el resultado se suele obtener al acabar la prueba y no se necesita ningún cuidado especial después de realizar la ecocardiografía.

Esta información es de carácter divulgativo y no sustituye la tarea de los equipos profesionales de la salud. Si necesitas ayuda, ponte en contacto con tu profesional de referencia.
Publicación:  11/11/2024 Última modificación:  11/11/2024
Servicio de cardiología y cirugía cardíaca
Servicio de Cardiología y Cirugía Cardíaca
Ver más
Cardiología y Cirugía Cardíaca Cardiología y Cirugía Cardíaca
ecocardiografía