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Hidrocele

Niño con problemas de hidrocele estirado en la cama

El hidrocele es la acumulación de líquido en el escroto alrededor del testículo, común en recién nacidos. Se distinguen dos tipos: comunicante (congénito) y adquirido. Los síntomas incluyen aumento del volumen escrotal, pero generalmente son indoloros. El diagnóstico se basa en la exploración física y, en casos selectos, una ecografía. El hidrocele comunicante suele resolverse espontáneamente antes de los 2 años y, si persiste, requiere cirugía para cerrar la comunicación. En el hidrocele adquirido, se evacua el líquido y se eliminan las membranas responsables de su producción.

¿Qué es el hidrocele?

El hidrocele es un acúmulo de líquido en el escroto alrededor del testículo. Es un hallazgo frecuente en recién nacidos: alrededor de un 10% de los niños nacidos a término lo puede padecer y la incidencia es más alta en niños prematuros.

Existen dos tipos de hidrocele:

  • Hidrocele comunicante o congénito: presente desde el nacimiento (aunque a veces se hace evidente semanas o meses después). Es debido al paso de líquido del abdomen a través de una pequeña comunicación que persiste tras el descenso de los testículos de la cavidad abdominal al escroto. En los casos en los que el conducto es más amplio, puede permitir también el paso de un asa de intestino, formándose en este caso una hernia inguinal. Cuando se cierra la comunicante con el abdomen y queda el líquido atrapado en la región inguinal, se llama quiste de cordón.
  • Hidrocele adquirido (no comunicante o “del adulto”): se manifiesta en la adolescencia. Se produce por un exceso de producción de líquido (o falta de reabsorción del mismo) por parte de las cubiertas que rodean el testículo.

Dibujo del hidrocele

¿Cuáles son sus síntomas?

Los pacientes presentan un aumento de volumen de la bolsa escrotal. En los hidroceles comunicantes es característica la variación de tamaño durante el día, aumentando típicamente por la tarde/noche. También es frecuente que aumenten de volumen tras un proceso febril.

En general, no producen ningún síntoma. Son indoloros y raramente causan molestias. En caso de que el líquido acumulado esté a tensión, puede producir sensación de pesadez o molestias debido al peso del escroto.

En caso de presentarse acompañado de dolor súbito, enrojecimiento o aumento de volumen repentino, es recomendable acudir a urgencias para descartar otras patologías testiculares.

¿Cómo se diagnostica?

El diagnóstico es clínico mediante la historia y exploración física. Se palpa el testículo de tamaño normal con un aumento de volumen escrotal por el líquido circundante. Al aplicar una luz en la piel del escroto (transiluminación) se observa el líquido alrededor del testículo.

En algún caso seleccionado, puede realizarse una ecografía, aunque no suele ser necesario.

¿Cuál es el tratamiento del hidrocele?

En general, el hidrocele comunicante se resuelve espontáneamente antes de los 2 años de vida. Si persiste más allá de esta edad, requerirá tratamiento quirúrgico. La cirugía consiste en vaciar el líquido del escroto y cerrar la comunicante para evitar que pueda volver a acumularse.

En el caso de los hidroceles no comunicantes, se evacuará el líquido del escroto y se quitarán las membranas que recubren el testículo que son las que lo producen y almacenan.

Esta información es de carácter divulgativo y no sustituye la tarea de los equipos profesionales de la salud. Si necesitas ayuda, ponte en contacto con tu profesional de referencia.
Publicación:  26/09/2023 Última modificación:  06/06/2024
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