El norovirus, una de las principales causas de gastroenteritis aguda en niños
La gastroenteritis aguda es un cuadro repentino de diarrea, a menudo acompañado de náuseas, vómitos, dolor de estómago y fiebre. El norovirus es probablemente la principal causa de gastroenteritis aguda en niños a nivel mundial, predominando en la época invernal en nuestro país.
Esta carga de enfermedad por norovirus ha aumentado en los últimos años, en parte por la disponibilidad de la vacuna contra el rotavirus. El norovirus es altamente contagioso y se propaga rápidamente, especialmente en entornos donde hay estrecho contacto entre personas, como en escuelas y guarderías. Cuando hay varios casos de gastroenteritis aguda en personas de un mismo entorno, siempre es necesario sospechar un brote de infección por norovirus.
El período de incubación del norovirus (el tiempo entre la infección y la aparición de los síntomas) es de entre 12 y 48 horas. Los síntomas más comunes en niños son los vómitos de inicio brusco, la diarrea acuosa, el dolor abdominal tipo cólico, las náuseas y, en ocasiones, fiebre.
La enfermedad suele autolimitarse en 1 a 3 días en la mayoría de los casos. Sin embargo, una complicación común es su deshidratación, especialmente en los niños más pequeños, que pueden necesitar atención médica si pierden demasiados líquidos.
¿Cómo se transmite el norovirus?
El norovirus se puede transmitir de diversas formas, lo que hace que sea muy difícil de controlar en entornos comunitarios.
Las rutas más comunes de transmisión son:
Contacto directo entre personas. Es muy frecuente en las guarderías, donde los niños tienen interacciones cercanas, comparten espacios y juguetes y los hábitos de higiene no están bien establecidos.
Alimentos y agua contaminados. El norovirus puede contaminar los alimentos durante su preparación, especialmente si quien manipula los alimentos está infectado.
Contaminación ambiental. Las superficies y objetos contaminados pueden ser un medio de transmisión, especialmente en sitios como escuelas, guarderías o restaurantes.
Algunas personas que no presentan síntomas (portadores asintomáticos) también pueden transmitir el virus a sus familias o comunidades.
En las personas que presentan gastroenteritis aguda, el virus puede estar presente en heces y continuar siendo contagioso durante 4 semanas, aunque se hayan resuelto la diarrea y otros síntomas.
¿Cómo se diagnostica la infección por norovirus?
En la mayoría de pacientes con gastroenteritis aguda, no es necesario identificar su microbio causante. En personas de riesgo o frente a cuadros graves, la infección por norovirus se puede confirmar por tests antigénicos (proteínas del virus) o tests moleculares (material genético del virus) en una muestra de heces.
Tratamiento del norovirus en niños
La gastroenteritis aguda es un problema de salud muy habitual que en la mayoría de los casos se resuelve sin complicaciones, con medidas sencillas como cambios en la dieta y descanso. La ingesta de líquidos para reponer agua y sales minerales perdidas es esencial para prevenir la deshidratación. No existe ningún tratamiento específico para la gastroenteritis aguda por norovirus. Tampoco existe ninguna vacuna que proteja de esta infección en la actualidad.
A los niños con gastroenteritis aguda es necesario ofrecerles líquidos (agua o suero oral)a menudo; evitar las bebidas carbonatadas o los zumos. Es necesario que coman cantidades pequeñas de alimentos sólidos con mayor frecuencia de lo habitual, sin forzarlos, y evitando grasas, azúcares, alimentos procesados, y comida especiada. Preferirán alimentos cocinados a la plancha, al vapor o al horno.
Si tienen vómitos, no es necesario forzar la ingesta, y ofrecerles cantidades muy pequeñas de líquidos de forma progresiva. Eventualmente, y siempre por consejo médico, pueden utilizarse fármacos que reducen los vómitos.
Medidas preventivas
Para prevenir la infección por norovirus y también por otros microbios que causan gastroenteritis aguda, son necesarios unos buenos hábitos de higiene. Hay que lavarse a menudo las manos con agua y jabón, especialmente después de ir al baño y cambiar pañales, y antes de preparar y consumir alimentos. Es necesario seguir las normas de higiene, conservación y preparación de los alimentos. También conviene lavar bien los objetos y superficies que se pueden contaminar con las heces, como los cambiadores.
Si convives con alguien afecto de gastroenteritis, es necesario desinfectar el lavabo y cualquier otro lugar que pueda haberse contaminado con vómitos o heces, y lavar con agua caliente y jabón la ropa que se haya podido ensuciar.
El norovirus es un virus muy "resistente": aguanta temperaturas extremas, y no se erradica con desinfectantes a base de alcohol.
Esta información es de carácter divulgativo y no sustituye la tarea de los equipos profesionales de la salud. Si necesitas ayuda, ponte en contacto con tu profesional de referencia.
Es una de las enfermedades más comunes que afectan a bebés y a niños pequeños: al cumplir los 3 años, tres de cada cuatro niños habrán tenido otitis media.
El molusco contagioso es una infección viral cutánea que causa pápulas o nódulos elevados con apariencia de perla en la piel. Es una infección benigna, y es bastante común entre los niños. ¿Qué debemos hacer si estas lesiones aparecen en la piel de nuestro hijo?
La infección urinaria en niños es común y puede afectar tanto a niñas como a niños, especialmente en los primeros años de vida. Esta afección se produce cuando las bacterias ingresan al sistema urinario. Los síntomas varían según la edad y la ubicación de la infección. El diagnóstico se basa en pruebas de orina, y el tratamiento implica antibióticos. Prevenir la infección urinaria implica mantener una buena higiene genital y una adecuada hidratación, especialmente en niños más pequeños.
La toxoplasmosis es una infección ocasionada por el parásito Toxoplasma gondii. Es una enfermedad generalmente leve que la mayor parte de las veces puede pasar desapercibida o confundirse con una gripe.