Protección de menores en entornos digitales: ¿qué incluye el nuevo proyecto de ley?

Desde los teléfonos inteligentes hasta la inteligencia artificial, las nuevas tecnologías son una realidad presente en nuestra vida cotidiana. Para los niños, niñas y adolescentes, el espacio digital representa un mundo infinito de posibilidades y suponen un cambio radical en la manera de interactuar con su entorno respecto de las generaciones anteriores. Sin embargo, a pesar de la familiaridad con estas tecnologías, inherentes a su estilo de vida, no está exenta de riesgos para los nativos digitales.

El borrador del anteproyecto de ley para la regulación de los entornos digitales que acaba de presentar el Gobierno pretende reforzar la protección de los menores en ámbito digital mediante la incorporación de medidas que favorezcan su seguridad en Internet y redes sociales. 

Para ello, la nueva propuesta del Gobierno, apoyada por los ministerios de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Juventud e Infancia, Transformación Digital y Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, recoge las principales líneas de actuación y mecanismos para conseguir entornos digitales seguros. 

Control parental 

Los dispositivos electrónicos, como teléfonos inteligentes, tabletas, ordenadores y videoconsolas, deberán incorporar de fábrica la función de control parental digital e implementar sistemas de verificación de edad que sean "efectivos y obligatorios", según la propuesta de ley, que las familias podrán configurar en cada caso, en función de la edad y las necesidades de los menores. 

La activación del control parental puede ser una oportunidad para revisar los hábitos de consumo de pantallas de toda la familia y explicar a los menores los riesgos de determinados servicios y plataformas. 

Los expertos recuerdan que el acceso a las nuevas tecnologías debe ser guiado y supervisado y, aunque no existe una fórmula mágica, la vigilancia y el acompañamiento son imprescindibles para la educación digital saludable.

Aumento de la edad de acceso 

La edad de acceso y registro en redes sociales se eleva hasta los 16 años, actualmente si sitúa a partir de los 14 años, y se implantarán sistemas de verificación de edad por defecto en los dispositivos, superiores a los existentes.

Del mismo modo, los menores de 18 años tendrán prohibido visitar plataformas digitales que utilicen mecanismos aleatorios de recompensa, con lógicas similares a las de los juegos de apuestas, presentes en muchos videojuegos y páginas web. 

Para evitar posibles adicciones, las familias deben estar atentas a señales de alarma en sus hijos. Como ocurre con las adicciones a sustancias, los jóvenes que muestran adicciones comportamentales pueden experimentar una necesidad cada vez más elevada de estar conectados, con más frecuencia o duración, y síndrome de abstinencia ante la privación, caracterizado por malestar como tristeza, irritabilidad e inquietud física.

La principal preocupación de la mayoría de las familias gira en torno al uso excesivo de los dispositivos electrónicos y el número de horas que pasan delante de alguna pantalla. No se trata de prohibir el uso de Internet en la era tecnológica, sino de educar en el uso adecuado de la red. 
 

Revisión pediátrica periódica

La nueva ley propone integrar un examen específico para identificar adicciones y usos problemáticos de las tecnologías en menores dentro del programa de revisión del niño sano. Este programa abarca visitas desde el nacimiento hasta los 14 años y cuenta con la participación de matronas, enfermeras y pediatras de los equipos de atención primaria. 

Los pediatras coinciden en la necesidad de realizar evaluaciones del tiempo de exposición a las pantallas y sus efectos en la salud física y mental, estar atentos a signos de adicción y cambios de comportamiento y destacan la importancia de promover hábitos saludables que incluyan actividades al aire libre, ejercicio físico y relaciones sociales fuera del ámbito digital. 

Marco legal para los nuevos delitos digitales

El anteproyecto de ley también recoge modificaciones en el Código Penal para hacer frente a los delitos emergentes en la red, como el ciberbullying, acoso sexual o grooming, o la difusión de material pornográfico a menores de edad. De acuerdo con el documento, los mecanismos propuestos van desde la instauración de una orden de alejamiento virtual “de redes sociales, foros, plataformas de comunicación o cualquier otro lugar en el espacio virtual”, hasta condenas legales para quienes difundan imágenes y voces falsas con herramientas de inteligencia artificial, conocidas como deepfakes, sin consentimiento.

Alfabetización digital

En el ámbito educativo, se buscará potenciar la educación en ciudadanía digital, alfabetización mediática, privacidad, protección de datos y propiedad intelectual. Los centros educativos también podrán regular el uso de teléfonos móviles y otros dispositivos personales en las aulas. 

La alfabetización digital no solo consiste en saber utilizar un aparato digital, sino también en entender cómo estas tecnologías pueden mejorar nuestra vida diaria y seamos más productivos y eficientes con ella.