Los niños son más vulnerables a sufrir problemas de salud a consecuencia de los factores ambientales
La salud de la población depende en gran medida de los factores genéticos y ambientales. En los factores ambientales encontramos, a parte de las variaciones del clima, los contaminantes del aire, las sustancias químicas, el ruido, los pesticidas, el tráfico, entre otros. Los efectos que esta exposición a los contaminantes y factores ambientales afectan a la salud quedan reflejados en este artículo, siendo los niños quienes van a sufrir en mayor medida sus consecuencias.
La contaminación atmosférica, los pesticidas, compuestos orgánicos persistentes, los agentes químicos o incluso el ruido; son factores de exposición ambiental que repercuten en la salud y desarrollo de los niños y niñas. Los efectos de la exposición a estos contaminantes durante el embarazo o los primeros años de vida ponen en riesgo la salud de la persona incluso en la edad adulta.
Los estudios muestran que algunos de estos contaminantes ambientales acceden a la placenta y tienen efectos en el crecimiento fetal, en el neurodesarrollo, la salud respiratoria e inmunitaria y pueden llegar a producir alteraciones en el ADN del embrión. Por ese motivo se recomienda a las familias que eviten la exposición a estas sustancias incluso antes de concebir a los hijos.
Contaminación del aire
El desarrollo urbanístico actual de las ciudades no favorece la sostenibilidad, la habitabilidad ni la salud. La gran mayoría de las personas vivimos en urbes con un alto nivel de tráfico, ruido, falta de zonas verdes, ... que tiene como consecuencia unos altos niveles de contaminación del aire y perjudica la salud. Los niños son más vulnerables a los efectos de la exposición ambiental de los contaminantes del aire por su fisiología y sus hábitos que les exponen a dosis más altas a lo largo de la vida.
Una de las investigaciones realizadas por ISGlobal en Barcelona ha mostrado como alrededor del 50% de los casos de asma infantil se debe a la exposición de los contaminantes del aire. Y en el mundo se calcula que el 93% de los niños están expuestos a unos niveles de contaminación del aire elevados según la OMS.
La contaminación atmosférica agrava las enfermedades respiratorias
Desde el Institut de Recerca del Hospital Sant Joan de Déu (IRSJD) y el Hospital Sant Joan de Déu Barcelona han realizado un estudio para esclarecer si existe una relación entre: el aumento de infecciones respiratorias pediátricas y los niveles de contaminación atmosférica. Coordinado y liderado por la Dra. Georgina Armero y el Dr. Cristian Launes y con la participación de las Dras. Carmen Muñoz-Almargo e Iolanda Jordan.
Para ello han tenido en cuenta, la infección por rinovirus (o resfriado común) que acostumbra a presentar una sintomatología leve y en pocas ocasiones (10%) origina cuadros clínicos más graves que requieran hospitalización (bronquiolitis, broncoespasmos…).
Han observado cómo durante el periodo del 2010 al 2018, han ido aumentado los casos graves en la infección por rinovirus de los pacientes pediátricos al haber un aumento de ingresos en la Unidad de Curas Intensivas Pediátricas del Hospital Sant Joan de Déu. En el estudio han conseguido relacionar los picos de ingresos en la UCIP con los registros de mayor contaminación ambiental por óxido de nitrógeno en la ciudad.
Concluyendo que la exposición a concentraciones elevadas de óxido de nitrógeno en la atmósfera afecta a la gravedad de las infecciones respiratorias.
Los menores pasan gran parte de la jornada en las escuelas y por ello las escuelas han de tener un papel importante como garantes de un entorno y ambiente seguro. Los colegios para garantizar la correcta calidad del aire y un ambiente adecuado con espacios abiertos y correctamente ventilados. Los colegios han de tener espacios adecuados de recreos con árboles, zonas de juegos, sombras de muros verdes, fuentes de agua potable,…
Las ciudades han de diseñarse para poder atender las necesidades de las personas y garantizar un entorno seguro como la creación de espacios y zonas verdes (superislas) que también ayudan a mantener y regular las temperaturas en las diferentes épocas del año. Disminuir el tráfico rodado en los entornos escolares para favorecer un ambiente seguro y libre de contaminantes.
El papel de las familias
Las familias han de velar también por garantizar un ambiente seguro para sus hijos, pues no más del 20% de los niños y niñas disfrutan de realizar actividades al aire libre al menos una vez al mes y apenas un 10% van al parque cada día. Esta falta de contacto con el entorno y la naturaleza tiene perjuicios contra la salud: aumenta el sedentarismo y con ello el riesgo a padecer obesidad, enfermedades respiratorias o cardiovasculares, peor pronóstico en enfermedades crónicas; incluso efectos en el neurodesarrollo infantil con aumentos en los trastornos de conducta, problemas de comportamiento, problemas de atención, etc. Si promovemos que nuestros hijos e hijas tengan contacto con la naturaleza estaremos favoreciendo a que tengan un neurodesarrollo motor adecuado, reducir los problemas de sueño, ansiedad o estrés y teniendo un impacto positivo en su rendimiento escolar.
Los efectos en el neurodesarrollo
Alrededor del 20% de la población infantil sufre alteraciones en el neurodesarrollo y este número va en aumento debido a los efectos de los contaminantes ambientales incluso antes de la concepción.
Existen diferentes substancias químicas que sus exposiciones durante el periodo embrionario tienen efectos perjudiciales para el correcto desarrollo de feto. Ejemplo de ello son algunos metales, pesticidas o sustancias químicas que son capaces de atravesar la barrera hematoencefálica (la que protege el cerebro de las sustancias tóxicas) antes de que está llegue a desarrollarse completamente.
Las sustancias tóxicas o químicos ambientales pueden interaccionar y modificar nuestra herencia genética favoreciendo la aparición de alteraciones en el desarrollo de nuestros hijos. Por ese motivo es importante tener en cuenta algunos consejos para evitar al máximo la exposición a estas sustancias: tener presente la calidad del aire de la zona en la que vivimos para planear las actividades que vamos a desarrollar en el día, tener contacto con la naturaleza, ventilar los espacios, no utilizar el agua caliente del grifo para consumir, evitar los recipientes plásticos para los alimentos, escoger alimentos ecológicos, etc.
Los efectos en la salud mental
El aumento de la globalización, los desastres climáticos, los niveles de contaminación o los estilos de vida cambiante tienen efectos en la salud mental de toda la población.
Los niños y adolescentes al ser más vulnerables a los efectos cambiantes del medio ambiente desarrollan ansiedad ante la incertidumbre, preocupación y temor que estos cambios están ocasionando en el planeta y su salud. Pudiendo padecer lo que se denomina ecoansiedad o solastálgia, generando en ellos un bajo estado de ánimo, desesperanza, impotencia, rabia, ira, pánico, culpa, etc.
Algunas de las recomendaciones para que los padres puedan ayudar a sus hijos son: escucharles, realizar acciones juntos para disminuir los efectos del cambio climático, participar en acciones colectivas, tomar consciencia del problema como familia y fomentar el contacto con la naturaleza.
Presentación del 13º informe FAROS
El pasado 19 de octubre se presentó el 13º Informe FAROS: El ambiente y su impacto en la salud materno infantil: ¿a qué nos enfrentamos? Un llamamiento a la reflexión y a la sensibilización, para dar a conocer cuáles son las consecuencias de la exposición a los factores ambientales y los riesgos en la salud infantil. En la realización del informe han participado profesionales del Hospital Sant Joan de Déu Barcelona y de ISGlobal Barcelona.
El informe recoge además consejos y recomendaciones para las familias sobre como minimizar la exposición a los contaminantes o qué pequeños pasos podemos hacer para lograr un menor impacto y exposición.
Esta información es de carácter divulgativo y no sustituye la tarea de los equipos profesionales de la salud. Si necesitas ayuda, ponte en contacto con tu profesional de referencia.
La unidad centra su trabajo en la asistencia a pacientes con necesidades relacionadas con la salud medioambiental, formación de profesionales, divulgación e investigación.Unidad de salud mediambiental maternoinfantil
13ºInforme FAROS: El ambiente y su impacto en la salud materno infantil: ¿a qué nos enfrentamos? Un llamamiento a la reflexión y a la sensibilización.
Efectos del cambio climático en las escuelas: olas de calor perjudican la salud y el aprendizaje. Soluciones incluyen vegetación y climatización adecuada.
Este artículo habla sobre el impacto del cambio climático en la actividad física. El cambio climático tiene repercusiones en las condiciones de los entornos y los recursos que usamos para la práctica de algunos tipos de deportes o actividades.
Hoy en día, la mayoría de las personas y niños viven en ciudades, pero, en muchas de ellas, una planificación del suelo y el transporte urbanos que dista mucho de ser óptima conlleva la contaminación de aire, ruido, el efecto isla de calor y la falta de zonas verdes, todo lo cual es perjudicial para la salud.
La Academia Americana de Psicología describe la ecoansiedad como el temor crónico a sufrir un cataclismo ambiental que se produce al observar el impacto del cambio climático sobre la Tierra.
El agua es vida y constituye una necesidad básica y un derecho universal de las personas. En el mundo tres de cada diez personas carecen de acceso al agua segura; agua que es utilizada para beber, para la preparación de los alimentos y también para la higiene personal.
El sistema alimentario es responsable de un tercio de las emisiones de gases con efecto invernadero. Desde que los alimentos se producen hasta que llegan hasta nuestros platos pasan por muchas etapas y en cada una de estas etapas se van generando más emisiones.
En primer lugar, necesitamos tener en cuenta que existen diferencias entre los peligros ambientales y los factores de riesgo. Un peligro ambiental es un término cualitativo que expresa la capacidad de un agente ambiental de dañar la salud de una persona.
Para frenar la crisis climática se deben tomar decisiones a nivel político, pero nosotros también podemos contribuir de forma directa con nuestras acciones diarias a disminuir nuestra huella de carbono.
La crisis climática global, tal vez sea la mayor amenaza para la supervivencia humana en un futuro cercano, afectará de manera desproporcionada a la salud de los niños y niñas, en particular, a la de aquellos que nacen en entornos con recursos limitados, tanto dentro como fuera de nuestro país.
Visualiza el acto de presentación del 13er Informe FAROS sobre el ambiente y su impacto en la salud maternoinfantil. ¿A qué nos enfrentamos? Un llamamiento a la reflexión ya la sensibilización.